Investigan la predisposición genética a las fracturas por estrés

Científicos de la Universidad de Liverpool (Reino Unido) y de la Universidad Ariel (Israel) han identificado un posible factor genético que explicaría por qué algunas personas son más susceptibles de padecer fracturas por estrés. Este estudio supone el punto de partida para futuros tratamientos de medicina personalizada para esta frecuente lesión deportiva.

Las fracturas por estrés son causadas por la presión constante ejercida sobre el hueso durante cierto tiempo. Al contrario que las fracturas normales, las fracturas por estrés son el resultado de traumatismos causados por uso mecánico constante como correr o saltar, lo cual hace que sean muy frecuentes en atletas y militares. El efecto de los constantes saltos y carreras infringe una serie de “micro traumatismos” al hueso. La respuesta de nuestro organismo a dichos micro-traumatismos es un proceso denominado “remodelación ósea” en el que el hueso dañado es eliminado y reemplazado por hueso sano.

Investigadores del Instituto de envejecimiento y enfermedades crónicas de la Universidad de Liverpool estudiaron la contribución de un gen específico a fracturas por estrés en dos grupos de voluntarios, uno compuesto por 518 atletas de élite y el otro por 210 reclutas del Tsahal o ejército israelí. Los investigadores evaluaron el papel de un gen específico, el P2X7R. En estudios anteriores se había hallado una relación entre este gen y baja densidad ósea de la espina dorsal y pérdida acelerada de masa ósea en mujeres post-menopáusicas.

El estudio halló dos variantes concretas en el gen que se asociaban a mayor o menos incidencia de fracturas por estrés: mientras que la variante SNP rs3751143 se asociaba a fracturas por estrés, que el alelo variante de rs1718119 se asociaba con una menor incidencia de fracturas por estrés en reclutas militares. Se ignora cuál es el mecanismo preciso, pero se cree que este podría incluir una menor sensibilidad del hueso a cargas mecánicas o a cambios adversos en ciertos tipos de células óseas. No obstante, estos hallazgos son los primeros en demostrar una asociación entre fracturas por estrés y variantes específicas en receptores purinérgicos.

atletas

Este trabajo se basa en estudios pioneros anteriores que consiguieron demostrar por primera vez que los receptores purinérgicos son expresados en células óseas y que regulan la respuesta ósea a las cargas mecánicas. Los investigadores concluyen que serán necesarios trabajos adicionales con una cohorte más grande para elucidar los mecanismos subyacentes a fin de desarrollar medidas preventivas y tratamientos personalizados.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Tus opiniones serán siempre bienvenidas si cumplen las guías de participación que puedes leer en esta página. Al enviar tu comentario, entendemos que has leído y aceptado estas normas, basadas en el respeto, veracidad y pertinencia de los comentarios.